Donamos la recaudación a la Asociación Abeto de Murcia

En Trabajo Solidario creemos que la verdadera transformación social se construye desde abajo, con pequeños gestos llenos de sentido. Por eso, hemos decidido donar la recaudación obtenida con nuestra chapa solidaria a la Asociación Abeto, un colectivo con sede en Murcia que trabaja incansablemente para ayudar a las personas sin hogar a reconstruir sus vidas mediante el apoyo, la formación y la economía circular.

Una colaboración con impacto local y humano

La Asociación Abeto es un ejemplo vivo de cómo la solidaridad puede cambiar realidades. Su labor se centra en acompañar a personas en situación de exclusión, ofreciéndoles herramientas reales para reinsertarse en la sociedad: desde programas de formación y reciclaje profesional, hasta iniciativas basadas en la economía circular que fomentan la autosuficiencia, el trabajo en comunidad y el respeto al medio ambiente.

Su lema lo dice todo:
«Juntos, podemos hacer la diferencia en la vida de quienes más lo necesitan.»
Y desde Trabajo Solidario, nos sumamos a ese mensaje con esta donación.

La chapa que transforma

Nuestra chapa no es solo un símbolo de identidad; es también una herramienta concreta de solidaridad. Gracias a todas las personas que la han adquirido, hemos podido canalizar una ayuda directa hacia una organización que trabaja cada día para devolver la dignidad, la esperanza y el futuro a quienes más lo necesitan.

Apostamos por la solidaridad entre asociaciones

En un contexto donde la exclusión social sigue afectando a demasiadas personas, creemos firmemente en el trabajo en red, en la solidaridad entre colectivos y en apoyar proyectos que, como Abeto, demuestran que otra forma de hacer las cosas es posible.

Esta donación es nuestra manera de decir: estamos con vosotros. Y también de invitar a más personas a conocer y colaborar con esta iniciativa transformadora que, desde Murcia, está sembrando justicia, apoyo mutuo y oportunidades reales.


Gracias a quienes formáis parte de esta cadena solidaria. Con cada chapa, construimos comunidad. Con cada gesto, reafirmamos que el cambio empieza en lo pequeño, pero nunca se queda ahí.

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